Sandra Curiel Alegre, alumna del Grado en Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural de la Escuela Politécnica Superior de la Universidad de Burgos, ha ganado el primer premio nacional PepsiCo Agricultura Sostenible con su trabajo Fin de Grado “Modelización sostenible del riego por goteo subterráneo del maíz”cuya motivación principal es el ahorro de agua, así como su consumo eficiente dentro de una Agricultura Sostenible.
En la II edición del Premio Universitario PepsiCo a la Agricultura Sostenible para el curso 2014 – 2015, organizado por PepsiCo Iberia, Sandra ha conseguido alzarse con el triunfo dotado con 3.000 € en metálico de premio y una semana de visita y formación en el programa agrícola de PepsiCo Iberia (cultivos de patata, maíz y cacahuete), tutelado por los miembros del departamento Agrario de PepsiCo
Sandra Curiel Alegre afirma que la motivación principal de este proyecto es el ahorro de agua, así como su consumo eficiente. Desde que empezó hace 4 años a estudiar el Grado en Ingeniería Agroalimentaria y del Medio Rural ha estado muy concienciada y muchos de sus trabajos durante esta etapa han estado orientados a este asunto.
Este trabajo fin de carrera se basa en la modelización de un sistema de riego mucho más eficaz a los utilizados en la actualidad. Sandra analizó determinados estudios y consideró una idea bastante innovadora la implantación de un sistema por goteo subterráneo de riego para el maíz, que a la vez de realizar un uso más eficiente del agua iba a ser un sistema más sostenible a su vez en cuanto a fitosanitarios se refiere. Otra de las ideas principales de este proyecto es la de crear una producción lo más sostenible y eficiente posible.
“No sé si será la mejor propuesta que PepsiCo ha recibido, pero para mí –afirma Sandra- es el mejor proyecto que podría haber hecho. Creo que la idea es buena y que he tenido un año de dedicación plena a sacarlo adelante, ahora cada vez que veo un campo de regadío, incluso un pequeño jardín, pienso en la eficiencia de su riego, en la sustentabilidad de esos cultivos, pienso si lo que se hace en el campo se hace con conciencia de algo o se hace como se ha venido haciendo siempre porque así sale bien”.
Hija de agricultores, “toda mi vida he estado “mamando” el campo pero desde siempre con otra perspectiva, pensando un poco más allá e incluso desde muy pequeña convenciéndoles a innovar. El año pasado realicé un Erasmus en Italia que me ayudó incluso más a ver estas cosas, ya que la Universidad de Florencia está muy concienciada en el tema”.