La Universidad de Burgos ha organizado el taller “Comunicar la Ciencia”, que tiene el objetivo de dar a conocer entre sus investigadores aquellas técnicas de comunicación y divulgación para que puedan acerca sus investigaciones a la sociedad.
El vicerrector de Investigación, Jordi Rovira, ha presidido la presentación del taller y ha puesto de manifiesto el interés de la Universidad por la divulgación científica de la actividad de sus investigadores. Durante el taller se explicado las tendencias de participación ciudadana en ciencia y tecnología, las bases del periodismo científico y tecnológico, la divulgación y los instrumentos de participación ciudadana, entre otras cuestiones. Para ello ha contado con la participación del secretario general de Universidades del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, Juan María Vázquez; Antonio Calvo Roy, presidente de la Asociación Española de Comunicación Científica (AECC), Oscar Méndez, director de Explora Proyectos; y de Fernando Torrecilla, técnico de comunicación de la Secretaría de Estado de I+D+i.
Juan María Vázquez ha destacado el creciente interés de los ciudadanos por la ciencia y la tecnología desde 2004, que prácticamente se ha duplicado, citando datos de la VII Encuesta de Percepción Social de la Ciencia y la Tecnología que elabora la Fundación Española para la Ciencia y la Tecnología. Además, Vázquez ha expresado el interés por la divulgación científica como motor de vocaciones científicas. También ha destacado que el momento actual es propicio para la divulgación gracias a las nuevas tecnologías y al creciente interés por la ciencia que se ha detectado entre los jóvenes.
Por su parte, Antonio Calvo ha insistido en la importancia de la especialización en la información científica. “los periodistas científicos, más que conocimientos, que también, necesitan contactos, más que bibliografía, agenda”.
Oscar Menéndez ha subrayado el papel fundamental de las redes sociales para la difusión de la ciencia y la tecnología. “Las redes son una de las herramientas más útiles para la comunicación científica, no sólo porque con ellas podemos emitir información de forma global, sino sobre todo porque permiten mantener contacto con personas e instituciones de todo el mundo”.
Para finalizar, Fernando Torrecilla ha ofrecido una serie de recomendaciones a los investigadores para lograr que sus mensajes lleguen a la ciudadanía de forma comprensible, como la adaptación del lenguaje, los titulares atractivos, evitar los tecnicismos y el uso de metáforas y símiles, entre otros.